Diez mandamientos para las parejas
7:00 | 0 comentarios | amor conyugal, antropologia del amor, consejos
- Recuerda que tu esposa es tu compañera y no tu propiedad.
- No esperes que aparte de ser tu esposa también trabaje por un jornal.
- No pienses que tus negocios no le conciernen.
- Deberás conservar su amor de la misma manera que lo ganaste.
- Harás de la edificación de tu hogar tu primera ocupación.
- Deberás cooperar con tu esposa para establecer una disciplina familiar.
- Deberás entrar a tu hogar con alegría.
- No permitirás que nadie critique a tu esposa en tu presencia, ni a tu padre, ni a tu madre, ni a tu hermano, ni a tu hermana, ni a ningún pariente.
- No debes pensar que tu esposa estará de acuerdo en todo.
- Recordarás tu hogar y lo mantendrás santo.
- Honra tu propia condición de mujer para que tus días puedan ser largos y felices en el hogar que tu matrimonio te proveyó.
- No esperes que tu marido te de tantos lujos como los que tu padre te ha dado después de muchos años de sacrifico y economía.
- No olvides la virtud del buen humor, pues ciertamente todo lo que el hombre tiene lo dará por la sonrisa de una mujer.
- No debes regañar.
- Debes mimar a tu esposo, pues ciertamente, todo hombre ama a una mujer que le consiente.
- Recuerda que la sincera aprobación de tu esposa significa mas para tu felicidad que las miradas de aprobación de extraños.
- No olvides la gracia de la limpieza y el buen vestir.
- No permitas que nadie te diga que resulta difícil vivir con tu esposo, ni aun tu madre, ni tu hermana, ni tu tía soltera, ni a ningún pariente tuyo, pues en el juicio no serás hallada inocente por dejar a otros menospreciar a tu esposo.
- Cuida de tu hogar diligentemente, pues de el saldrá el gozo en los días de tu vejez.
- Encomienda tus pasos al señor tu Dios y tus hijos crecerán y te bendecirán.
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